El Hombre Tántrico

En la tradición milenaria del Tantra Yoga, el hombre lo representa a SHIVA, el polo masculino del Universo. El aspecto emisor, solar, positivo (+). Ello no quiere decir que él no contenga y no deba desarrollar en si mismo las cualidades mas relacionadas al aspecto de receptividad o femenino de su ser, pero el aspecto masculino SHIVA es en él explicito.

El tántrico trata de identificarse cuanto mas con este principio y de vivirlo despertando en su ser las cualidades correspondientes al estado de VIRA o héroe espiritual.

El estado de Vira

Tales hombres llenan todo el espacio con su presencia y magnetizan las miradas.
Ellos manifiestan un estado de fascinación benéfica. Sus aspiraciones son siempre hacia la luz y la perfección divina. 

El estado de VIRA o de héroe espiritual es muy diferente al estado que normalmente se entiende como "masculino". Un verdadero VIRA realiza acciones con metas espirituales precisas que siempre son acorde a la armonía universal, intentado despertar en él la lucidez para aferrarse a la Voluntad Cósmica Suprema.

El hombre que comienza a despertar el estado de VIRA, se encuentra a si mismo y ve al mundo como una continua transformación desafiante.

Un verdadero VIRA tiene como su mayor felicidad hacer plenamente feliz a la mujer amada. 

Porque sabe que en la mujer que ama se ve reflejada su alma y que ella representa la energía colosal (SHAKTI) que le da fuerza y lo sostiene en sus acciones.
El Tantra ofrece al hombre una mayor comprensión de la mujer (SHAKTI) y así le da la posibilidad de amarla en su totalidad. 

El hombre tantrico admira y transfigura espontáneamente a la mujer, le gusta sentir la energía femenina, sus matices y encantos. El disfruta de las manifestaciones de la feminidad, sabe verlas y sentirlas empáticamente, se siente relajado en la presencia de las mujeres y no tiene un sentimiento de superioridad.  Es sensible y bueno; llena el alma y el corazón de la mujer ganando de este modo su confianza y ayudandola a sanar las heridas del pasado a través del calor fulgurante del amor puro y activo.

En el camino tántrico el hombre aprende a relacionarse con la mujer amada en todas las facetas que ella manifiesta como su novia y esposa pero también ve en ella la madre, la hija, la hermana, su mejor amiga y la iniciadora que lo instruye en los secretos del amor.

Un hombre que aspira a despertar este estado en su ser comienza por el control de la energía erótica poniendo prontamente en aplicación las técnicas para aprender a realizar la Continencia Sexual perfecta. Esto no lo realiza por ser la sexualidad el tema mas importante, sino por ser la energía mas poderosa, "el caballo mas salvaje", que una vez domado le da la libertad para tener realmente el control de su ser y relacionarse a la sexualidad de un modo sagrado y netamente superior.

El estado de VIRA se encuentra potencialmente en todos los hombres y a través de las herramientas del Tantra Yoga, realizando practicas sistematicas, adecuadas y perseverantes tanto en grupo como de modo individual llegan a desarrollarse plenamente. 

A través de aprender Tantra Yoga un hombre logra:

• Energía masculina y carisma personal.
• Elasticidad corporal, fuerza y vitalidad.
• Ejercicios para armonizar y equilibrar la energía sexual.
• Amplificación de la fuerza de impacto personal.
• Métodos eficientes para la eliminación del estres y de las tensiones y modalidades por las cuales se pueden evitar las acumulaciones de estas energías en el organismo.
• Entendimiento sobre los principales tipos de manifestaciones de la energía sexual y psicoafectiva de las mujeres, etc.
• El Curso de Tantra Yoga ofrece métodos de desarrollo personal muy útiles, tanto para aquellos que están integrados en una pareja (para amplificar las cualidades de esta pareja poniendo en práctica las enseñanzas milenarias tántricas), como para aquellos que no están integrados en una pareja, pero quieren amplificar las cualidades personales para lograr después el éxito en la realización de una pareja conforme a sus aspiraciones.